Carlos Mario Villanueva Tenorio, hijo del ex gobernador Mario Villanueva Madrid, confirmó que el rancho “El Mostrenco”, ubicado a la orilla del camino Chetumal-Calderitas, el cual en su momento fue el orgullo de su padre, está a la venta.
Según dijo, hay empresarios interesados en comprarlo, pero no quiso dar cifras porque es un tema que no atiende directamente.
Sin embargo, desde hace días trascendió que la empresa canadiense K&A planea construir ahí un hospital de alta especialidad y un complejo habitacional para comunidades en edad de retiro, en el cual se proyecta una inversión de cuatro mil 500 millones de dólares.
La oferta, aparentemente, se planteó en un viaje realizado en noviembre pasado a Quebec, Canadá, por el gobernador Carlos Joaquín González. El predio estaría valuado en poco más de 500 millones de dólares.
La venta de esa propiedad, en donde se pensaba que Villanueva Madrid viviría luego de obtener su libertad, reflejaría el deterioro de la economía familiar, debido a que el ex gobernador se mantuvo prófugo desde abril de 1999 hasta mayo de 2001, cuando fue aprehendido en Cancún, acusado de lavado de dinero, narcotráfico y conspiración para introducir drogas a Estados Unidos.
Si bien en junio de 2007 salió libre, exculpado, fue apresado nuevamente a las puertas del penal para responder a un juicio de extradición pedido por Estados Unidos, acusado de asociación delictuosa y delitos contra la salud.
Una vez extraditado, fue sometido a proceso en Nueva York por conspiración y asociación ilícita para la importación y distribución de cocaína y cargos adicionales por lavado de dinero procedente de narcotráfico. La acusación establecía que junto con su hijo Luis Ernesto Villanueva Tenorio, quien sigue prófugo, y la ejecutiva bancaria Consuelo Márquez, lavó dinero en Estados Unidos por cerca 30 millones de dólares que insertaron en el sistema financiero de ese país en forma fraudulenta.
La defensa y los continuos viajes de su familia a los lugares donde permaneció encarcelado –primero el Centro de Readaptación Social número 1 “El Altiplano”, conocido popularmente como “Almoloya” y después el Reclusorio Norte de la Ciudad de México, cárceles de Nueva York y Kentuky–, gastos en su defensa, atención médica, hospitalización y el pago de impuestos por las propiedades del ex gobernador, consumieron luego de 20 años cuantiosos recursos.
Villanueva Tenorio dijo que “la superficie donde se ubica el rancho son una de las opciones que evalúan los empresarios canadienses para asentar el proyecto médico, pero desconozco el avance de las negociaciones”.
“El Mostrenco” ocupa una superficie de 12 hectáreas en las que hay árboles frutales, caballos de raza, ganado, gallos de pelea, pista de aterrizaje para helicópteros, lugares de hospedaje con capacidad para albergar a por lo menos 500 personas con servicios de piscina, jacuzzi, canchas de tenis, gimnasio y spa.
Ahí también funcionó una discoteca de los años 70’s, 80’s y 90’s, denominada “EVO Disco”, que manejó Carlos Mario.
El inmueble se deterioró por el abandono durante los 10 años que permaneció bajo resguardo de la Procuraduría General de la República (PGR).
“Era muy caro vivir en el Mostrenco”, no nos alcanza para darle mantenimiento porque “vivimos al día”, expresó Villanueva Tenorio.
En cuanto a la salud de su padre, refirió que se encuentra hospitalizado, con custodia policial, debido a que las enfermedades crónico-degenerativas que lo quejan obligan a mantenerlo bajo observación y cuidado permanente.
Con información de Infoqroo.
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